La historia
Todo comenzó en 1995, en una calle ajetreada de Salou, a pocos pasos del mar. Allí abrimos nuestro primer local, con una idea sencilla pero firme: rendir homenaje a la cocina tradicional castellana y mediterránea. Con el tiempo, aquella esquina en la calle Barbastro se convirtió en mucho más que un restaurante. Se volvió un punto de encuentro. Un lugar donde los clientes pasaban a ser conocidos, y los conocidos, parte de la casa. En 2016, sentimos que aquel local se nos quedaba pequeño. Nos trasladamos al corazón del pueblo, para estar más cerca de los nuestros y seguir haciendo lo de siempre, pero aún más convencidos de nuestra misión. Hoy seguimos fieles a nuestras raíces: brasa, producto de calidad y un servicio cercano. No entendemos de modas; si estás aquí, es porque tú también valoras las cosas bien hechas. Bienvenido